Paso a paso

• En un bol, añade la harina, la sal y el agua caliente. Mezcla y amasa durante 5 minutos.
• Observa la masa y si aún se pega en las manos, añade más harina y si está muy seco, añade más agua. El punto perfecto de la masa es que esté blandita y muy manejable, pero justo que no se pegue en las manos.
• Cubre la bolita con un paño y déjala descansar 1 o 2 horas.
• Pasado el tiempo, corta la masa en 4 partes más o menos iguales.
• Enharina una superficie de trabajo y estira cada porción con un rodillo hasta que quede de un grosor de unos 2 o 3 mm.
• En un mortero, macha el ajo y ponle un buen chorreo de aceite de oliva.
• Pinta la superficie del pan que hemos estirado, con la mezcla de ajo y aceite y espolvorea unas hojas de perejil.
• Enrolla cada pan en forma de rulo desde un extremo a otro, dejando el relleno de ajo y perejil dentro.
• Cuando lo tengas en un rulito, vuelve a enrollarlo sobre sí mismo como un caracol.
• Cuando lo tengas enrollado como un caracol, aplástalo ligeramente con la masa, y después un poco con el rodillo, hasta que lo aplanes circularmente del tamaño y forma de una tortita.
• Es momento de pasarlo por la parrilla o la sartén.
• Cocina unos minutos por cada lado hasta que queden dorados.
• Te recomiendo tomarlo con hummus o con tu salsa favorita.